El capitalismo lo ha aprendido y ha dejado de dudar de sí mismo
(….) Nunca se ha muerto nadie de contradicciones. Y cuanto más
ello se estropea, más esquizofreniza, mejor marcha, a la americana.
Deleuze & Guattari, El Antiedipo.
Incluso en buena parte de la política progresista de hoy, el riesgo no es la pasividad sino la seudoactividad, la urgencia por ser activo y participar. La gente interviene todo el tiempo, intentando “hacer algo”, los académicos participan en debates sin sentido; lo verdaderamente difícil es dar un paso atrás y retirarse de allí(…)En oposición a este modo interpasivo, por el que estamos activos todo el tiempo para asegurarnos de que nada realmente cambie, el primer paso verdaderamente crítico es retirarse a la pasividad y negarse a participar. El primer paso limpia el terreno para la auténtica actividad, para un acto que efectivamente cambie las coordenadas de la escena
Slavoj Zizek, Para Leer a Lacan, Paidós, 2006.
1.
Uno de los más interesantes análisis en Multidud, el libro de Michael Hardt y Antonio Negri (ambos muy vinculados con la filosofía de Deleuze y Guattari) es cuando tratan la cuestión de las identidades performáticas, o de los movimientos sociales que se integran a través de la Performance ( movimientos queer, ecologistas, feministas posmodernas, etc.). No es casual la conexión entre el movimiento artístico así denominado y el uso del mismo término por los antropólogos sociales para identificar la manera en que las nuevas multitudes ensayan y escenifican la manifiestación de sus acciones políticas.
Para Hardt y Negri, la nueva revolución social parte de esa fragmentariedad de grupos, de esa rizomática de acciones políticas “actuadas” y que confluye en una gran tarea bio-política revolucionaria que sólo se une en el momento en que estas multitudes desean oponerse a la megamáquina capitalista y tratar de contrarrestar su imperio.
“El Speakeasy Internet Café, en la Segunda Avenida de Seattle, era uno de los centros de convergencia convenidos. En esos típicos días grises de finales de noviembre de 1999, los grupos activistas afines se reunieron en el Speakeasy para confeccionar grandes marionetas de cartón-piedra y organizar sus protestas. Algunos de esos activistas eran extranjeros, y muchos llegaron de otras ciudades de la costa del Pacífico, pero la mayoría eran de Seattle. Los profesores de los institutos habían centrado sus clases en cuestiones globales, los estudiantes universitarios habían estudiado el comercio global, los grupos religiosos y los activistas políticos habían previsto acciones de teatro de calle y había celebrado seminarios sobre la protesta pacífica y los abogados habían organizado equipos de observadores y se habían ofrecido para la defensa de los posibles detenidos. Seattle estaba preparada”. Antonio Negri y Michael Hardt, Multitud, Debate, 2004.
Raphaël Glucksmann en el libro Mayo de 1968 , pone énfasis en la situación extrema en que una sociedad completa, desde esa fragmentareidad, se une y transforma la sociedad, desde una perspectiva diferente a las viejas tomas del poder: sin vanguardia política, sin líder carismático, sin coincidir todos en todos los fines, las “nuevas revoluciones”, como describe la revolución naranja que se experimentó en Ucrania en el año del 2004, apuntan a actos de desobediencia civil y sin violencia, experimentan una democracia lúdica que sin embargo tiene tintes de rebelión popular y resultados emancipatorios.
“El pueblo naranja controla la ciudad y se niega a apoderarse de las instituciones(…)Espera un compromiso y nuevas elecciones(…)La conclusión violenta, antaño garantía de autenticidad, hoy está proscrita(…)Las nuevas revoluciones no pueden terminarse(…)La revolución al no ser nunca total, está siempre por recomenzar: pernanentemente(…)deja de ser para existir(…)se renueva.” André y Raphaël Glucksman, Mayo del 68, Taurus, 2008.
Los movimientos sociales hoy en día no son encabezados por líder alguno,ni lo necesitan, no se guían por una teleología emancipadora, incluso las revoluciones culturales, que no son puntuales ni urgentes, como sí lo era el caso de Ucrania, están situadas en un sino, en “ya esto ya lo otro”, que impide que se conviertan en salidas únicas para tal o cual renovación o cambio de mentalidades y actitudes, es decir, impiden en sí msimas que se establezcan rúbricas de época o definiciones tajantes sobre lo que son o no son las identidades.
Pasa lo mismo con las identidades juveniles, cada vez tiene menor importancia que todos compartan las mismas ansias liberadoras, el cambio de condiciones, la rebelión, como sucedíó en toda la primera parte del siglo XX. En cambio, las juventudes de la primera mitad del siglo XXI, son multirreferenciales, abiertamente performáticas, cambian de posturas y se acomodan a la multiplicidad de voces, lease, se generan esa identidad como una puesta en escena de lo diverso, son cínicos con la herencia de cualquier tarea política unívoca e irónicas con la historia de la revolución tomada al pié de la letra; gustan de sabotear el lenguaje e inoportunar con la exageración de lo contrario, un poco a la manera en que los situacionistas planteaban usar las armas del humor y del sinsentido para generar confusión.
2.
Pero en el margen anterior a la revuelta social, existe también ese mundo en que la transgresión cultural es desde siempre moneda de uso corriente. La escenificación de las identidades contraculturales no es cosa que por vez primera sea “fashionable”, como hoy en día los llamado Hipsters, un término originado desde los tiempos del bohemio francés: boina, todo de negro, fumando, leyendo y tomando café en la Rive-Gauche, (hay que recordar, que la bohemia fue incluso una moda en México, con los llamados Cafés Existencialistas que ya existían en 1959), más tarde el término se refierere a los Beatniks, pues el mismo Ginsberg hablaba de ellos mismos como “hispters”, palabra que da lugar a la denominación de hippie (por ahí hay un libro llamado Las Culturas de Posguerra de Jeff Nuttal que se consigue por eBay en donde se da cuenta de la genealogía de las identidades contestatarias).
Esta historia de las actitudes transgresoras como poses, como modas, han devenido en el Hipster actual que sin embargo , nos habla de algo más que una simple postura recursiva, de retome, de repetición. El Hipster de las calles de Londres, San Francisco, Nueva York, Coppenhague, Berlín o Barcelona en el año 2008 tienen otro punto de contacto con sus orígenes, y es que de la misma manera que los Beatnkis a finales de los 40, son por ejemplo, jóvenes universitarios, graduados o por graduarse, que pueden llevar su vida poética y de compartir un loft con otros, varios años de su vida antes de retornar al ciclo productivo, y esto ya no es visto ni como traición a la causa, ni tampoco lo contrario; en el mundo productivo, el tatuaje, el pasado ocioso y lúdico no es un impedimento para reaccesar sus carreras como individuos generadores de riqueza, entrar a la empresa, crear una, etc.
En otras palabras, lo que antaño no era pero parecía una separación de mundos, hoy en día es una contradicción tolerada que incluso sirve para “normalizar” cada tanto cualquier postura más radical o más conflictiva socialmente. La cuestión es que en el Hipster se han fusionado y cerrado doble y recursivamente las posturas de aceptación de la sociedad captalista tal cual es hoy en día, así como las formas de salida, las acciones renovadoras y emancipadoras.
Si Seattle en 1999 y Ucrania en el 2004 abrieron la brecha y zanjaron un ejemplo de posible revolución del Siglo XXI, los nuevos Hipsters, hermanos quizás menores de los anteriores, integran sin pudor el mundo que se ataca y el mundo que se vive, aceptando y rechazando a la vez, y haciéndose ver en las calles, con ese compromiso-descompromiso, mientras que la sociedad se satisface en verlos y sentirse a la vez segura de que no cometerán actos sediciosos pero que le van bien a la vida bohemia de la ciudad, como escenografía de los nuevos tiempos.
Amas de casa, post-yuppies, punks desfasados, emos, skinheads, white trashers, ejecutivos, empresarios chic, empresarios wasted, diseñadores, fotógrafos, wannabes, nerds, policias, ladrones, hiphoperos, asiáticos disfrazados de esto y mucho más, mexicanos nacos ilegales, mexicanos nacos-chic, vaqueros, putos, putillas equis, artistas encumbrados, artistas por triunfar, loosers, anti-fashion, víctimas del fashion, drogadictos, conductores de televisión, todos comparten con mucha ilusión el nuevo escenario de la Gentrification y le cuentan a sus amigos pueblerinos de lo que se pierden por no estar viviendo en Nueva York.
Cientos de tiendas de discos under, tiendas de libros under, clubes secretos de conciertos de lo más independiente, teatro extraño, experimentación en la cocina, organicidad, jogging, experimentación en la cama, celibato y promiscuidad, amor por la ropa vieja mezclada con ropa cara, hoy elegante y en un hotel de cinco estrellas, mañana con cinco días sin bañarse hablando otros idiomas con los amigos Hipsters extranjeros por las calles de Mitte, Williamsburg o Wicker Park. Leyendo sobre física de las partículas, a Dostoievsky en el metro, o sencillamente riendo con la explicitud de South Park o lo inocuo de Ugly Betty.
En un inspirado texto llamado La Proliferación de los Márgenes de inicios de los años ochenta, incluído en el libro “Plan Sobre el Planeta”, Félix Guattari escribe:
“El capitalismo mundial integrado no pretende aplastar de un modo sistemático y generalizado a las masas obreras, a las mujeres, a los jóvenes, a las minorías… Los medios de producción en los que se asienta exigen una cierta maleabilidad de las relaciones sociales y de las relaciones de producción, y un mínimo de capacidad de adaptación a las nuevas formas de sensibilidad y a los nuevos tipos de relaciones humanas en las que se van produciendo diferentes «mutaciones». (Recuperación publicitaria de los «inventos» marginales; tolerancia
relativa respecto a zonas de laisser faire…) En estas condiciones, una contestación semitolerada, semiestimulada y recuperada podría formar intrínsecamente parte del sistema”.
3.
Pero lo que también se ha generado con esto es que la puesta en escena es compartida, en estas ciudades sobrevigiliadas por cámaras, todos somos Truman y a la vez todos han convertido la paranoía de la vigilancia en un plató iluminado en el que esa decadencia a la vez que plenitud comercial, es la vida en tiempo real tan deseada por todos, es el tiempo del deseo compartido, de las sonrisas y la fiesta sin recelo, y por ello ni secreta ni sorpresivamente, todos salen a las calles a triunfar, a ser descubiertos por un buscador de modelos, un ejecutivo de cuenta de una empresa de diseño, un promotor de bandas indie, etc.
Hoy en día la oportunidad de convertirse en estrellas mediáticas,supera a los bonitos y fresas y bien vestidos, puedes ser feo pero tus botines y tus pantalones y tu aire desacomplejado te da tu oportunidad de ser un héroe de la contracultura instantánea; las calles de las grandes ciudades como NY o Londres o Tokyo, son a la vez pasarelas, escenarios, las geografías posmodernistas, zonas de diversión underground, fiestas de revistas “alternativas” , las paredes llenas de graffitti trazados por chavos estudiantes de las escuelas de arte, son el perfecto decorado, son un plató en tiempo real que da la oportunidad de que la fama mundial alcance a muchos.
De hecho las tradicionales élites contraculturales, grupos de intelectuales como los Beatnik que salieron a conocer y a experimentar y cantar el mundo de la libertad luego de terminar sus estudios en Universidades top, ya no llevan la batuta de este underground deshechable; ya tampoco son los chicos de los guettos que con su conciencia social, alertando con sus prácticas transgresoras del rock o el hip-hop o el ruidismo las que establecen los márgenes de la otredad artística y cultural.
Aunque obviamente sigue existiendo el privilegio de innovar después de graduarse en el Mills College o en Harvard y tratar de inventar el nuevo Max/MSP o el siguiente Facebook, pero en realidad de alguna forma la competencia en este sentido sigue dependiendo mucho de que sea una innovación que alcance rápidamente las calles y se convierta en un lenguaje compartido, fácil de usar a la vez por muchos, para que sea tomado en cuenta como parte de la escenificación.
Finalmente no estamos frente a las espontáneas alianzas político artísticas de los rechazados racialmente o de las víctimas del clasismo, estas ya no generan modos de vida alternativos que luego seguirían como moda advenedizos o poseurs de lo activista-chic. Se ha terminado de una buena vez el esquema de lo marginal cultural, de lo innovativo secreto, se terminó la tradición del bohemio de vida rebelde y envidiado por el normalizado que era visto a su vez por los rebeldes con causa como una víctima del acondicionamiento capitalista.
Hoy el look “contracultural” es un código de etiqueta para acceder al plató urbano, aunque te quites el disfráz en la noche cuando llegas a la casa, porque nadie puede vivir con un sólo disfráz, además hay películas y fotos tomándose en diferentes escenarios todo el tiempo, y nadie ve mal que una persona maneje dos o tres identidades distintas, sino que de eso se trata, se puede ser un alto burgués en la cena de negocios que un artista locuaz entresemana en un loft de las zonas “pobres-chic” industriales de Brooklyn o de Friederischein en Berlín.
Los chicos Hispter han creado su propia democracia del gusto, son mutlirraciales, creen en la belleza de lo feo, lo cool de lo wasted y se fotografían y se hacen estrellas de su propio juego de ganadores-derrotados, es decir, aparentan ser unos loosers, unos despreocupados de la ignorancia y lograron mutar un nuevo ser a partir del matrimonio entre United Colors of Benetton y la pelícual Kids, que son los dos modelos “simbólicos” de lo Hipster.
Esa democracia del gusto es sin embargo el carnét de identidad de una revolución del consumo masivo, justamente la prueba de la fuerza de los flujos de la discordancia como creadora de los nuevos caminos del marketing. Para los Hipsters no hay nada más interesante en su postura que el hecho de que sea de primera mano mercancía, mientras más un accesorio tiene un valor comercial, más legitimidad tiene al ser usado como elemento pseudo transgresor. Por eso compiten entre ellos como empresarios y emprenden giros estéticos al mismo tiempo que logran innovar la forma del publishing, definitivamente llevándo el flyer del concierto, la radio colegial, la fanzine al nivel de empresa trasnacional.
Antes de ellos, la cultura alternativa se validaba a partir de una salida del márgen de la ciudad-negocio, para entrar en la ciudad-cultura underground; así se crearon los mitos que van en secuencia: San Francisco-NY-Londres de la era punk, Nueva York de la era disco, Madrid de La Movida, Austin de la era Indie, Chicago-Detroit de la era techno, Manchester del rave, Seattle del Grunge, Berlín y Montreal del techno minimal, etc.
En estos años que van de la década del 2000, la ciudad-negocio cultural abarca todo e incluso mejor, su cara central y su núcleo cultural ya no va de la oferta de los grandes centros museísticos y de las altas esferas del arte hacia los guetos culturales y márginalidades artísticas. Hoy las ciudades son atractivas justamente porque de entrada son un mundo de pequeñas galerías, clubes apestosos, mil y una tribus danzantes por las calles en terrazas y restaurantes que ofrecen por doquier toda la gama de vanguardias estéticas a la carta y en donde se cree generalizadamente que podrá surgir la next big thing que pondrá al mercado de cara a ese punto focal.
No es casual que el himno del Hipster sea Losing My Edge, de LCD Soundsystem, dueños del sello DFA Records, responsables de la multirreferencialidad y de la puesta en escena de sonidos de todos los tiempos reunidos en una nueva versión de la fiesta multicultural. Este tema que comienza con la frase “Yo estuve en Colonia en 1968 en el primer concierto de Can” representa justamente la manera en que este nuevo confetti de vanguardias, concentra en un esquema de negocios libre de culpas, la estética post-histórica sin necesidad de validarse como una innovación per se.
“El capitalismo instaura o restaura todas las clases de territorialidades residuales y facticias, imaginarias o simbólicas, sobre las que intenta, tanto bien como mal, volver a codificar, a sellar las personas derivadas de las cantidades abstractas. Todo vuelve a pasar, todo vuelve de nuevo, los Estados, las patrias, las familias. Esto es lo que convierte al capitalismo, en su ideología, en la pintura abigarrada de todo lo que se ha creído. Lo real no es imposible, sino cada vez más artificial. Gilles Deleuze y Félix Guattari, El Antiedipo, Paidós, 1973.
4.
Pongamos el ejemplo de la revista Vice, del Pitchforkmedia o de American Apparel; estas microestéticas devenidas mega empresas son cuasi corporaciones a toda vista y no hay pecado en la contradicción que ello podría representar con el hecho de que vendan vidas alternativas, ellos ya no sufren por la esquizofrenia del antiguo hipster que vería esto como venderse al ogro corporativo, sino el principio de una nueva forma de cultura marginal , apta para quien quiera y quien la quiera la tiene que querer así.
Si los Emo irritan a quienes aun viven en la integralidad de la identidad contracultural porque reúnen en sí, como atractores, la historia completa del under rockero, endulzándolo y haciendo de su nostalgia una amable cuento de nenitos sensibles, sin miedo a ser tachados de maricas o algo por el estilo, los Hispters reúnen en sí toda la historia del consumo masivo, el juego que se abrió el día que la mercadología se valió de lo creado por la bohemia, los Hipsters han desterritorializado incluso ello, ya ni siquiera es la vanguardia devenida publicidad, sino que pueden vivir perfectamente entre ambas, en una o en otra, juegan perfectamente dentro del vértigo delirante de la historia completa de la vanguardia y la historia completa de los negocios.
Son quienes en la escuela secundaria crecieron con los poetas malditos porque sus profesores se los enseñaron en clase, ya lo decía el mismo Ginsberg, una dósis de Rimbaud y Dylan Thomas al día creará las mentes de la nueva generación, pero también llevaron materias en las que conocieron las tésis macroeconómicas más complejas; se educaron en las escuelas de música en donde la electroacústica, el atonalismo, el cut and paste concreto eran materias de la preparatoria, pero también hicieron matemáticas avanzadas.
Las visiones desacralizadoras en la ciencia, el pragamatismo político, de la ingeniería mecánica a la sistémica a la biológica a la social, son temas que manejaron bien o mal pero a lo que estuvieron finalmente expuestos. No se diga en la historia del arte, los Hipsters fueron a escuelas en que la cualidad central de la obra es la hiper-designación, es decir, un arte dirigido a la práctica, que ya no radica en la obra sino en la función, el arte es la arquitectura, el mobiliario, la iluminación, la acústica, el color, el arte está en la publicidad, salen de las escuelas de creación con dirección a los negocios y generan las innovaciones desde ordenadores que crean animaciones para las empresas más exitosas de televisión y cine.
Los Hipsters son los ESP Kids (Extraverted Sensing Perceiving) en sus veintitantos, y al manejar toda la información detallada de una máquina de conocimientos como los descritos, el cocktail de drogas y alcohol de cualquier noche de la semana no tiene nada de aclarador o de iluminador, como sucedía con los movimientos contraculturales del siglo veinte, en que las drogas, el libertarismo sexual, político, etc. los destacaba, los resaltaba como cuestionadores del Status Quo.
Entendámosolo de una buena vez, los Hipsters son el resultado de un esquema de formación social al que fueron sujetos, en donde las nociones de alternativa cultural, de vanguardia, de innovación tecnológica aplicada a la vida cotidiana , son asuntos totalmente familiares y accesibles a toda hora, en la web o en las calles de la ciudad; no han pasado por los traumas históricos, más bien son los elementos clave de la sociedad del control, y viven perfectamente en ella, entrando y saliendo de ese control, según les plazca, conviniendo con las posturas más conservadoras hoy, uniéndose a visiones rupturistas y quizás de radicalismo político mañana.
**
Esta esquizofrenia es vista hoy por estos jóvenes como una ventaja de su sociedad capitalista, a la que cuestionan amando, a la que ponen fin en fin de semana, gracias a los artefactos que ésta les provee y les impone; familiarizados a la vez con el estado de las cosas que con el novum, no pueden sino practicar su utopia como si se tratara de un deporte en interiores, la bildung del Hipster se basa justamente en la explicación del ESP Kid y termina en el ideario de las contraculturas del siglo XX sin remordimientos:
They want to do everything in a BIG way
They have LOTS of energy
They love the outdoors
They love animals
They love to participate in sports and other physical activities
They’re extremely aware of their environment
They have a strong aesthetic appreciation for beauty
They need to be constantly busy, and usually have several projects going on
They are usually artistic
They love to be the center of attention
They’re very practical and grounded in reality
Descripción tomada de la página Portrait of an ESP Kid, http://www.personalitypage.com/ESP.html
Es evidente entonces que nada de lo hasta aquí dicho puede ser aplicado a los Hipsters mexicanos, pero eso es cosa de otro texto, sin embargo, continuará…
October 4th, 2008 at 9:27 pm
Que interesante…
October 5th, 2008 at 10:56 pm
LA POSE HIPSTER : eso ya se habia dado hace a;os desde los hipies y todo eso y sigue y seguira existiendo y cada uno adentro de simismos lleva uno es simplemente esta en todas partes loque siento que no les gusta es como que el extremo pero aun asi no pueden jactarse de nunca usar este tipo de figurines o templates aunquesea en un 2% que ustedes posiblemente ni creen pero es tan cierto que todos lo son osea en definitiva el unico punto que parese interesante es la especie de morbo que se crea al pensar ” sere yo uno de esos hipster”
1.- impostor
2.- ganas de demostrar que son reales
seme hacen mas caracteristicas mas creibles que las enlistadas (lo siento por elque escribio esto)
y no no me considero hipster nisiquiera y pues si caigo en muchisimas cosas que los define por asi decirlo
para dejar de ser asi necesitarias dejar toda costumbre y no ir encontra de las costumbres o moda, creo que lo unico no hipster hasta ahorita es ser un martir y flagelarse
cosas asi y para acabar todo en paz tanto nenes, happy fi, garage, noise, cafe iguanas, tiendas de ropa de esa home made , yo , miau, nrmal, y practicamente todos lo son
y pues si alguien se ofende , no es la intencion.
saludos
ps: tengo una enfermedad que no me permite distinguir ciertas letras bien disculpen
October 6th, 2008 at 12:13 pm
jajajjaja deberias ya hablar de los hipstertecas
gracias por la fuentes.
October 7th, 2008 at 10:48 am
Efectivamente no es lo mismo N.Y .que Mty., y las contradiccciones están al orden del día, y en todos los platos…
Más, ante las múltiples referencias, me parece algo abusivo empezar y
terminar con Deleuze y Guattari, invocarlos y luego pretender sellar la cosa con un “Entendámosolo de una buena vez”. . .
Como si se procurara cerrar hegemónicamente ahi, coartando movilidad, dialogo, o tratando de evitar otras construcciones.
October 7th, 2008 at 12:42 pm
A Minty:
Yo jamás dije que Ny era como Monterrey o viceversa ¿alguien de ustedes leyó algo así? Lo que digo es “tranquilos muchachos, no estoy hablando de ustedes”. Ahora bien Minty: “cerrar hegemónicamente” es una oración que no significa nada, checa en el diccionario lo que significa Hegemonia; ¿no será: “cerrar tajantemente” lo que quisiste decir?
Y sí, así son los textos, (las citas inclusive son porque este texto no es solamente para este blog sino que tiene que ver con un paper sobre identidades culturales más general que estoy escribiendo estudiando la obra de Deleuze y Guattari) uno establece una jugada y se puede estar o no de acuerdo, ahora, este texto está escrito, no vive por sí sólo, no te está dicendo, “cállate ya no hay más que decir!!” Si te corta la movilidad es porque tu lo decides, porque tu lo lees como un hasta aquí, pero jamás está tratando de evitar otras construcciones, así que mi querido Minty, esperamos tu texto de réplica con ansias…
A Alexico:
“creo que lo unico no hipster hasta ahorita es ser un martir y flagelarse ” ¿o sea que sólo hay de dos? ¡¡¡Alguien por favor que invente otras opciones!!!!!!!! ¡¡¡¡¡Alguien por favor que lea este texto con un sentido del humor un poco más finooooooo!!!!!!!!!!!!!!
October 7th, 2008 at 11:54 pm
pos como que clavarse en el tema es como platicar de la coca y de la pecsi
la neta siempre a sido asi siempre ahi modas porque son modas la neta si todo mundo fuera bien creativo y espontaneo todo mundo se vestiria diferente y raro y la verdad quien sabe si eso vaya a estar chido
lo malo es cuando vez cabrones ya bien peludos que anduvieron aca con chamara de cuero y grenia larga y luego anduvieron con pantalones baggy y patineta luego con pantalones apretados y flecos tapandole la cara y ahora andan todos de fosforecentes con camisetas del mercadito de paca de esas de sellitos ………chingandole a la razita que apenas esta probando con que es con lo qe se identifican
si ya andas acabando o ya acabaste la universidad y sigues cambiando de ideas como de calzones pos chiale algo pasa
demasiada filosofia par aalgo tan simple …….es casi imposible hacer algo original uno se viste habla y se comporta por procesos de imitacion es inevitable…….y cuando sale alguien diferente usualmente se hace maton o tiene un fetiche sexual raro…..
y tus camisetas hawaianas y tus limas apretadas a poco no tambien salen en mtv???
y a poco no? uno se viste para gustar….o sino todo mundo anduviera con camisetas planas blancas y pantalones de mezcilla azul clasico de soriana y zapatos negros de vestir nomas por cubrir
y si yo no me visto asi ni me gusta mucho de lo que se hace ahora porke me acostumbre al metal hoy ya no me gusta tantopero que la razta que viene tiene derecho a ambientar su generacion y su anio a como se le de la gana a mi nadie jamas me chingo por mis pelos parados con cemento gel ni mi collar de bolitas de persiana y eso caballeros se agradece
October 8th, 2008 at 9:51 pm
1. Se puede gustar de la flagelación sin martirizarse y ser un martir sin conscientemente gustar de la flagelación.
2. Por otra parte, sí cabe la posibilidad de que un texto diga “cállate no hay más que decir”, simplemente porque es algo que se puede decir y algo que el autor puede pretender (aunque no muy políticamente correcto), pero ahí le corresponde al lector asumirse como voz y no dejarse callar.
October 10th, 2008 at 12:28 pm
Dear Angie:
Jajja, claro que no mencionaste Monterrey,
Esa fue mi cuchara apuntando a eso de “nada de lo hasta aquí dicho puede ser aplicado a los Hipsters mexicanos”, tambien en referencia a cuando meme dice “Hipstertecas”, haha, y llevandolo un poco más close to home.
Por otro lado, venga, de diccionario:
“Se denomina hegemonía a la supremacía de una entidad sobre otras…”
deriva del verbo griego eghemoneno, que significa “guiar”, “preceder”, “conducir”, y del cual deriva “estar al frente”, “comandar”, “gobernar”. Por eghemonia el antiguo griego entendía la dirección suprema del ejercito”
Y, en palabras de una tal Helena Alapín: “un amplio conjunto de estrategias prácticas a través de las cuales un grupo obtiene consenso para su dominio por parte de aquellos que se encuentran a él subordinados”.
Anyways, algo de eso refería con cerrar hegemónicamente,
sí puede significar muchas cosas, y más aún, ésto se demuestra en tu respuesa-pregunta.
Ahora, si bien no tiene obviamente nada de extraño guiar en un texto, advertir, ejemplificar, favorecer un punto de visto de otro, etc. y en efecto muchas veces es lo esencial y necesario de lo escrito, a lo que me quería referir es algo bastante especifico, pero al mismo tiempo que se refleja y me salta a la vista, en relación a la invocación de D y G. Que también sospecho no era tu intención, pero aún así creo “filtra” de ahí ese “algo”.
Y a lo que apuntaba no es al contenido, sino a la estructura, por asi decirlo.
En el primero estoy de acuerdo sin objeción mayor, en cuanto al segundo, el texto, detonado por ese “cierre”, me daba una cierta impresion de no zambullirse de lleno en el modo de actuar (muy dificil sería decir metodología, aunque algo hay de eso, y mucho de otras cosas) de los citados. Ese tipo de no congruencia, de citar… pero no estar “mayoritariamente” en la misma postura(por lo menos muy visiblemente ahí creo)…es lo que me hacia un sonido-ruido que me llevaba a poner ese reply.
A mi lectura de Deleuze y Guattari (very dear to me, aunque ya de hace tiempo no tan fresca en mi mente: )- tan objetable como cualquier otra tal vez, pero yo creo que no tanto : P- algo importante es, como bien poetica e inspiradoramente nos dicen (si bien recuerdo en el “capitulo” de introduccion a Mil Mesetas, Rizoma,) “Hacer la línea no el punto”, que se me viene a la mente al leer esa ultima frase que replico y hasta refunfuño, si se gusta, hahhah.
Espero esta observacion te sirva de algo y “complemente” lo antes escrito (véase, paradójicamente, “guien” a lo que iba, pero tambien y a la vez, abran más cosas)
sobretodo ahora que nos das un teaser de eso que dices estar cocinando por ahi próximamente y que me encantaría “degustar” si lo pones por aquí o si te pasas el link.
: B
Sobrex!
October 10th, 2008 at 4:15 pm
¿por qué mejor no leen el texto tranquilamente, lo reflexionan y luego ya opinan sobre los temas que están en el texto? No sobre lo que ustedes creen que quise decir en el texto, o sobre lo que ustedes piensan que debe decir el texto…